Miguel
de Varona Navarro (Cuba) ( †)
Mano
pálida y frágil que llamas a mi puerta
persiguiendo
el encanto de una
anécdota incierta,
mi
corazón que anhela tu piedad nazarena,
espera
de tu gracia alivio a su honda pena.
Mano
diáfana y leve, lirio de eucaristía,
rosa
mística y santa, perfuma el alma mía.
Pon
sobre mis nostalgias tu
proverbial fragancia,
que
yo pondré en tu nácar la
dulce resonancia
de
un beso casto y puro, pletórico de unción…
Mano
pálida y frágil, nardo de ensoñación,
pon
tu mágico efluvio sobre mi corazón.
No comments:
Post a Comment